El Brexit desata la furia de los jóvenes británicos
La salida de la Unión Europea ha enfurecido a los jóvenes británicos, que estiman que se les han cerrado las puertas de un continente por lo que consideran el capricho de unos viejos nostálgicos.
La salida de la Unión Europea ha enfurecido a los jóvenes británicos, que estiman que se les han cerrado las puertas de un continente por lo que consideran el capricho de unos viejos nostálgicos.
En el referéndum del jueves, el 73% de los votantes entre 18 y 24 años votó a favor de quedarse en la UE. Entre los mayores de 65 años, ese porcentaje fue del 40%, según un sondeo de Lord Ashcroft.
Sin embargo, según la BBC, hay indicios de que los jóvenes fueron a votar en menor proporción que las personas de mayor edad, porque la participación fue inferior en las zonas del país con más jóvenes.
"La generación más joven ha perdido el derecho a vivir y trabajar en 27 otros países. Nunca conoceremos el alcance total de las oportunidades perdidas, las amistades, los matrimonios y las experiencias negadas", rezaba un comentario del joven británico Nicholas en el Financial Times, ampliamente difundido en las redes sociales.
"Nuestros padres, tíos y abuelos nos han quitado la libertad de movimiento", proseguía, "con un puñetazo a una generación que ya se ahogaba en las deudas de sus predecesores".
- Culturalmente, 'Reino Unido ha cavado su tumba' -
El malestar de los jóvenes, que no han conocido al Reino Unido fuera de la UE, venía alimentándose desde hace tiempo.
Los pensionistas quedaron al margen de los recortes del gobierno conservador, mientras los más jóvenes veían como se les empezaba a cobrar la educación universitaria, se cerraban centros de ocio y se eliminaban las ayudas sociales para independizarse, una medida que, si no hay marcha atrás, entrará en vigor en 2017.
Boris Johnson, líder de la campaña Brexit, trató de tranquilizarlos en su primera comparecencia tras la victoria aclarándoles que la salida de la UE no "significa destruir puentes ni es aislacionismo".
Pero para Nina Biddle, una estudiante de 21 años de la universidad de Sheffield que acaba de pasar un año en el extranjero gracias a un programa que sería imposible sin la UE, "el Reino Unido ha cavado su propia tumba, culturalmente hablando".
El año en el extranjero, en la isla francesa de la Reunión, "me permitió aprender otra lengua, ensanchó mis horizontes y enriqueció mi vida, de un modo que el Reino Unido no podía ofrecerme", explicó Biddle a la AFP.
"Somos nosotros los que estaremos viviendo más años con una Europa menos unida", lamentó, reclamando que el Reino Unido "mantenga los lazos con otros países europeos, y que las generaciones más jóvenes puedan beneficiarse de las nuevas relaciones, las oportunidades de empleo y la curiosidad por otras culturas".
- En los años 1970, 'había de todo' -
Debra McDermott, una pequeña empresaria que no quiso dar su edad, explicó a la AFP que los más mayores votaron salir de la UE porque "en los años 1970, cuando éramos niños, todo estaba muy bien".
"Había escuelas, hospitales, había de todo. Todo el mundo pagaba sus impuestos y todo funcionaba mejor. Desde entonces, el país ha ido cuesta abajo", estimó McDermott.
Dos historias muy comentadas durante la campaña muestran el contraste en la manera en que los ancianos se plantearon el voto.
Leonard Moore, un veterano de la Segunda Guerra Mundial, pidió antes de morir a su familia que enviaran su voto "Leave" por correo. Su sobrino estimó que Moore "luchó por su patria hasta el fin", dijo al Daily Mail.
En el otro extremo, Peter Dowey, de 73 años, ofreció su voto a su nieto de 17, Freddie Wells, que eligió la permanencia en la UE.
"He vivido ya el 70% de mi vida, y él el 20% de la suya, si consideramos que vivirá 100 años. Y, la verdad, le va afectar a él muchísimo más que a mí. Tiene el futuro ante él, y, por lo tanto, ocurra lo que ocurra, será su generación la que tenga que vivir con los desperfectos, o, según espero, con el florecimiento" del país, explicó Dowey a la BBC Radio.