Berlusconi dice que arrestarlo incitaría a una revolución en Italia
El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, quien perdió la inmunidad parlamentaria al ser expulsado del Senado la semana pasada...

El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, quien perdió la inmunidad parlamentaria al ser expulsado del Senado la semana pasada, dijo el jueves que estallaría una revolución en el país si fuera arrestado y llevado a prisión.
El magnate de los medios de 77 años fue privado de su banca en el Senado tras ser condenado por fraude fiscal a cuatro años de prisión. La pena fue conmutada a un año, que probablemente cumplirá mediante servicio comunitario.
Pero sin una protección parlamentaria, ahora es más vulnerable en otros casos penales donde es acusado de delitos que incluyen soborno político. Berlusconi también está apelando contra una condena por abuso de poder y por pagar para tener sexo con una menor de edad.
Cuando fue consultado si temía quedar arrestado en una entrevista con la radio francesa Europa 1, el político italiano respondió: "No, estoy seguro que no pueden, si no habrá una revolución en Italia".
El comentario se da durante una semana caótica de protestas y bloqueos de rutas en Italia por parte de un movimiento liderado por agricultores y camioneros.
El movimiento protesta por el fracaso de la clase política para abordar los graves problemas económicos del país, que han dejado a la economía más pequeña de lo que era hace una década y al desempleo juvenil en cerca del 40 por ciento.
Luego de dominar la política italiana durante dos décadas y de sufrir la humillación de ser expulsado del Senado, el político multimillonario ha dejado claro que usará sus recursos para desestabilizar la coalición gobernante del primer ministro Enrico Letta.
Berlusconi intentó derrocar al Gobierno antes de ser expulsado del Parlamento, pero en cambio dividió a su propio partido, ya que los disidentes apoyaron a Letta para preservar la estabilidad política.
Letta prometió el miércoles mantener a Italia lejos del "caos" antes de ganar dos mociones de confianza sin el apoyo de Berlusconi.
Berlusconi dice que los jueces italianos están motivados políticamente y que han realizado un "coup d'etat" y anulado la voluntad del pueblo al condenarlo por fraude fiscal.