Arabia Saudita renuncia a integrar el Consejo de Seguridad de la ONU
Arabia Saudita renunció este viernes a ocupar su asiento temporal en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para protestar contra "la impotencia"...

Arabia Saudita renunció este viernes a ocupar su asiento temporal en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, para protestar contra "la impotencia" del organismo ante los conflictos en Oriente Medio, y en particular en Siria.
Según un comunicado de la cancillería saudí, "los mecanismos de trabajo y la doble moral en el Consejo de Seguridad le impiden cumplir con sus obligaciones y asumir sus responsabilidades a la hora de mantener la paz en el mundo".
Por eso, Riad "no tiene más remedio que renunciar a la membresía del Consejo de Seguridad, hasta que éste sea renovado y dotado de los medios necesarios para cumplir con sus obligaciones y asumir sus responsabilidades, como garante de la paz y la seguridad en el mundo".
De este modo, Arabia Saudita "procura expresar su indignación ante los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad", declaró a la AFP el experto saudita Abdel Aziz Al Sager, director del Gulf Research Center.
"También procura expresar su malestar ante la nueva política de Washington, en particular las posiciones del presidente Barack Obama sobre Irán, Siria y Yemen", agregó.
Un diplomático dijo un Nueva York que este gesto "totalmente inesperado" no tiene precedentes.
Francia afirmó "compartir la frustración" de Arabia Saudita y recalcó haber propuesto en septiembre que los cinco miembros permanentes del Consejo (Estados Unidos, China, Rusia, Reino Unido, Francia) no usen su derecho de veto en caso de "crímenes masivos".
En cambio, Rusia criticó la decisión de Riad, calificando de "particularmente extrañas" las razones invocadas. "Con su decisión, Arabia Saudita se excluye ella misma de los esfuerzos comunes [desplegados] en el marco del Consejo de Seguridad para mantener la paz y la seguridad en el mundo", agregó la cancillería rusa.
Para Turquía, esta decisión hace "perder credibilidad" a la organización.
El jueves, Arabia Saudita había sido elegida por primera vez miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, al mismo tiempo que Chile, Chad, Nigeria y Lituania. Su mandato de dos años comenzará el 1 de enero de 2014.
El embajador saudí ante la ONU, Abdulá al Muallimi, dijo en un primer momento que ese puesto reconocía "la vieja política (saudí) de apoyo a la moderación y a la resolución de conflictos por medios pacíficos".
Pero este viernes, la cancillería dio marcha atrás y dijo que Riad se niega a formar parte de un organismo incapaz de resolver conflictos en Oriente Medio.
El comunicado destaca que "desde hace 65 años la cuestión palestina permanece sin solución", lo que ha conducido a "numerosas guerras que han amenazado la paz mundial".
El texto indica también en que "permitir al régimen sirio matar a su pueblo y quemarlo con armas químicas, ante los ojos del mundo entero, y sin sanciones disuasivas, es una prueba clara de la impotencia del Consejo de Seguridad a la hora de cumplir con su deber y asumir sus responsabilidades".
El ministerio criticó igualmente la incapacidad del Consejo de Seguridad de limpiar la región de armas de destrucción masiva, incluyendo las armas nucleares, en una alusión a Israel y a Irán.
Arabia Saudita, regida por una rama muy estricta del islam sunita -el wahabismo- recela mucho del programa nuclear de Irán, país mayoritariamente chiita. Las potencias occidentales e Israel acusan a Teherán de querer dotarse del arma atómica, lo que la República Islámica deniega con insistencia. Por su lado, Israel es oficiosamente la única potencia nuclear de Oriente Medio.
Riad, que apoya a los rebeldes hostiles al presidente sirio Bashar al Asad, a su vez aliado de Teherán, no ha dejado de criticar la gestión de la guerra siria por parte de la ONU.