A Saprissa se le alinean las estrellas para estar de vuelta en el torneo
Morados triunfaron ante Guadalupe con nueve jugadores y están a tres puntos de zona de clasificación.
Lo que hace unos días parecía algo casi imposible, hoy es una realidad. El Saprissa está de regreso a competencia y lucha por clasificar, luego de derrotar 1-2 a Guadalupe en el Colleya Fonseca.
A los morados se les alinearon las estrellas: los resultados de sus rivales fueron benévolos, logró remontar pese a terminar el juego con nueve jugadores y está a tres puntos de entrar en zona de clasificación con nueve puntos por disputar.
Hay que decirlo: el cuadro morado cambió gracias a la pizarra de Jeaustin Campos. El experimentado estratega ordenó la defensa y llenó de confianza a algunos futbolistas que carecían de ella.
El colocar a Aubrey David como lateral izquierdo y utilizar al hondureño Darixon Vuelto por el centro dejan ver la mano de un entrenador que sabe lo que hace.
Ya en el terreno de juego, los morados supieron sufrir. El inicio no fue sencillo, el equipo no se encontró y eso lo pagó caro a los 24 minutos con un autogol de Jaylon Hadden.
Con un nuevo marcador en contra, el timonel pidió calma a sus jugadores, que comenzaron a utilizar al inconstante Jimmy Marín como principal protagonista en el ataque.
Esa táctica surtió efecto a los 44 minutos con un tanto de Marín ante una mala salida de Luis Torres, quien tuvo que salir de cambio al finalizar el primer tiempo por un fuerte golpe en su cabeza.
Por si fuera poco, al 52' se fue expulsado Sinclair y al 78' Blanco. El primero golpeó con su brazo la cara de un rival, mientras que el segundo entró en una discusión con un guadalupano, pese a que balón no estaba en disputa.
Al 59', el atacante Andy Reyes marcó el tanto del triunfo, gracias a un largo servicio de Mariano Torres y a una buena definición de pierna derecha.
El portero Aarón Cruz volvió a ser figura para defender la ventaja. Tuvo un par de acciones de apremio.
Con más corazón que fútbol. Así fue como terminó el cuadro morado un partido que lo deja más vivo que nunca en el campeonato nacional.