“Que Dios me lo acompañe”, dice Figueres a Feinzaig sobre fusión y cierre de instituciones
Ambos candidatos presidenciales se vieron las caras esta noche en un peculiar debate sin moderadores ni frenos.
Los candidatos presidenciales José María Figueres (Liberación Nacional) y Eliécer Feinzaig (Liberal Progresista) se vieron las caras esta noche en un peculiar debate sin moderadores ni frenos.
El formato, organizado por TD Más, permitió un careo no visto hasta ahora en la contienda electoral, con los candidatos respondiendo a preguntas preestablecidas, pero sin tiempos ni ninguna regla más que un orden para leer y responder.
En ese ejercicio hubo espacio para preguntas de corte más personal y ligero y otras de fondo que avivaron la discusión y elevaron el tono.
En esa última línea, sobresalió sin duda la consulta sobre qué propuesta llevarían adelante ambos aspirantes en caso de resultar electos.
El primero en responder fue Feinzaig, quien sacó su anunciada carta de cerrar y fusionar instituciones en pro de aligerar el pesado aparato estatal.
“Atreverse a decir que hay que fusionar entidades es bastante impopular, pero lo que ha funcionado en otros países también puede funcionar acá, seguir haciendo lo mismo, aunque sea popular, no nos va a dar resultados distintos.
“¿Medidas impopulares? Fusionar 23 instituciones del sector social para crear un ministerio de bienestar social. Fusionar cuatro entidades que lidian con el sector productivo en un solo ministerio de producción, fusionar tres ministerio económicos en un solo ministerio de política económica… Ahí tiene varias medidas impopulares”, dijo Feinzaig.
“Mire don Eli, para esas fusiones que usted propone… Qué Dios me lo acompañe”, le respondió Figueres con una sonrisa.
“Espero que sus diputados también nos acompañen”, replicó Feinzaig.
Figueres apostó, en esa misma pregunta, por anunciar su intención de reformar y fortalecer Recope.
“Ese barco se está hundiendo”, le dijo el candidato liberal.
La acusación de que Figueres quebró al Banco Anglo durante su gobierno, la disputa por quién tiene mejor equipo de trabajo o la inexperiencia que el verdiblanco le subrayó, una y otra vez a Feinzaig, fueron parte de los variados condimentos de este ejercicio electoral que, sobre todo, resultó ameno.
También se habló de educación, de inseguridad y hasta de fútbol.
El cierre, como no podía ser diferente, tuvo además una dosis de picante.
Le invitamos a repasar el debate completo acá: