Por Deutsche Welle |16 de enero de 2021, 18:20 PM

El gobierno británico exigirá a partir del lunes (18.01.2021) que los viajeros procedentes de todos los países presenten una prueba negativa de COVID-19 y se sometan a una cuarentena, anulando los llamados corredores aéreos debido al surgimiento de nuevas cepas del coronavirus.

Debido "al riesgo de nuevas cepas procedentes del extranjero debemos tomar medidas adicionales para evitar que entren en el país, así que ayer anunciamos que prohibíamos los vuelos procedentes de Sudamérica y Portugal", afirmó el primer ministro Boris Johnson en una rueda de prensa televisada.

Esta medida, destinada a evitar la importación de una nueva variante del virus originada en la Amazonía brasileña, había sido anunciada el jueves y entró en vigor un día después.

"También cerraremos temporalmente todos los corredores aéreos a partir de las 04h00 (locales y GMT) del lunes", agregó.

Esto significa que cualquiera que desee viajar al Reino Unido tendrá que presentar antes de embarcar un test de COVID-19 negativo realizado en las 72 horas anteriores.

Además, deberá respetar 10 días de aislamiento total o realizar un nuevo test al cabo de cinco días de cuarentena que le permita salir de ella si es negativo.