Medford y el arte de creérsela: “No era solo plata, sino conocimiento, capacidad y estrategia”
El entrenador que marcó el Mundial de Clubes de Saprissa revive momentos de gloria en Japón.
Quizás usted, como yo, ha escuchado esto: “Hay que creérsela, si no lo hace, nadie lo hará por usted”. Bueno… Hernán Medford sabe esto. Lo ha adoptado como un arte en sus equipos, como su estrategia maestra. No por algo ha sido tan exitoso y ganador.
Su huella en el fútbol costarricense como jugador y técnico es imborrable. En esta oportunidad, Teletica.com conversó con Medford sobre el tercer lugar de Saprissa en el Mundial de Clubes Japón 2005, a propósito del máximo evento de clubes que recién inicia a través de las distintas plataformas de Teletica.
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—¿Cómo logró Saprissa hacer ese Mundial de Clubes? ¿Siente que conforme pasa el tiempo se hace más grande la leyenda morada en Japón?
Después de analizarlo, fue primero haber armado un gran equipo, un gran equipo futbolístico, con personas de cancha, parte de la iniciativa, comandados por don Jorge Vergara y, obviamente, por don Jorge Alarcón, Jeaustin Campos, haber formado un buen cuerpo técnico, que trabajamos muy bien, y escoger bien a los jugadores.
Entonces, al año, creo que, al año y algo después, se da obtener el campeonato de Concacaf. Y, obviamente, después de una muy buena planificación en todo lo general, hicimos unos partidos amistosos en Europa, antes de ir al Mundial, y se formó, se trabajó bien en todos los detalles, se trabajaron bien. Eso es cuando la parte gerencial conoce del tema. Y al final, pues, se obtuvo un tercer lugar con muchos méritos.
—¿Recuerda la charla técnica previa al inicio del Mundial contra el Sidney FC de Australia?
Sí, a mí me gusta mucho, en charlas, meterle actitud a los jugadores; obviamente, no solo eso, la verdad es que en cancha se trabajó muy bien, la verdad que Óscar (Ramírez) y yo hacíamos un complemento muy bueno, y obviamente con don Marcelo Tulbovitz en la parte física, entonces hicimos un buen complemento, en donde ya cuando llegaba a esos partidos, es hacer entender al jugador que se la tiene que creer.
Yo me acuerdo de una anécdota muy buena, una vez en un partido de la Champions, les dije yo: ‘Muchachos, vean la final de la Champions League, que ustedes van a tener que jugar contra el campeón’. Y le digo que la mayoría se reía de mí, la mayoría de jugadores se reía de mí. A los meses, estábamos jugando con el campeón de la Champions League. Eso es cuando uno tiene una tarea de creérsela porque los jugadores tienen una capacidad, entonces eso que a mí me ha llevado a tener tantos triunfos, obviamente siempre tratando de que mis jugadores se mantengan en esa forma, y entonces en esos instantes se dio esa parte y obtuvimos lo que al final todos saben.
—¿En cancha, cuánto se ensayó ese pase largo de Randall Azofeifa hacia Christian Bolaños que termina definiendo ese partido?
Hubo mucho trabajo, la verdad es que hubo mucho trabajo en cancha, con el conocimiento mío, complementándolo con el conocimiento de Óscar (Ramírez), e igual siempre cerca con Jeaustin, porque todos sabemos que sí, sabemos que es fútbol, entonces hicimos un complemento muy bonito. Como les dije, en la parte física, algo excepcional lo que hizo, lo que Marcelo (Tulbovitz) tuvo hecho. Se complementó un equipo futbolísticamente, mentalmente, físicamente, tácticamente, muy bien, muy bien, y obviamente con los jugadores metidos, haciendo caso, entendiendo todos los sacrificios que tuvimos que hacer antes del Mundial, lo entendieron bien, y al final, pues obtuvieron el premio.
—¿Qué se llevó para su experiencia del juego contra el Liverpool?
Pues una de las grandes experiencias fue haber jugado contra esos grandes jugadores, que al final el señor (Rafael) Benítez llegó y me buscó, hablamos un buen rato, me dijo: ‘¿Te acuerdas aquel partido que jugamos en el Rayo Vallecano y el Castellón?’, que fue en un partido donde el Rayo Vallecano ascendió a primera división, él era entrenador del otro equipo, y él se acordó muy bien, y estuvimos hablando un buen rato, un buen rato. Uno dice: púchica (sic), la hora que me habló él, pues un montón de cosas que uno aprende, un montón de cosas que uno dice, pues cuando es un equipo europeo, toda la diferencia que hay con nosotros, entonces fue una charla muy bonita después del partido.
Yo creo que al final se perdió 3-0, pero cuando usted ve un equipo como Saprissa, que tuvo varias oportunidades, varias oportunidades, lamentablemente no se lograron esas oportunidades, pero quiere decir que también nosotros le jugamos de tú a tú.
—¿Frente a Al Ittihad se dio el triunfo la “Saprihora”?
Sí, pues sí, a nosotros, bueno, en mi época de Saprissa, ahí fue cuando salió lo de la “Saprihora”. Éramos un equipo que era muy convencido, aunque iba perdiendo, siempre se la creía, siempre corría, siempre metía, y ahí al final en el Mundial de Clubes también se dio. Esa famosa “Saprihora”, donde le metemos un gol casi al último minuto y nos da el tercer lugar, pero como le dije, eso es, todo eso es a base de trabajo, y en la parte mental que siempre he dicho, a los jugadores que se la tienen que creer.
—¿Por qué no se ha vuelto a un Mundial de Clubes?
Difícil, difícil que un equipo de Centroamérica vuelva a Mundial de Clubes, no imposible, porque en el fútbol no hay nada imposible, pero sí difícil repetir Mundial de Clubes, no solo ir, sino repetir la hazaña, obviamente el que viene es un mundial diferente, pero nadie le va a quitar un tercer lugar a Saprissa, histórico, nadie, nadie.
Entonces es algo que quedará ahí marcado, que como le dije, no es imposible porque puede ser que en la historia en algún momento se pueda hacer, pero es muy difícil. Por eso, es un momento más que va a quedar en la historia, van a pasar los años y los años, y hasta el día que uno no esté aquí, ni en vida, téngalo por seguro que se van a acordar de esa gran hazaña.
—¿Qué hizo usted personalmente diferente a todos los otros entrenadores todos estos años? Muchas veces se dice del poderío económico mexicano y estadounidense…
No, no, no, ahí no era solo plata, ahí es conocimiento, capacidad, estrategia, cuando la estrategia todo lo que montó, desde la cabeza hasta nosotros, eso es un trabajo que no es fácil, y eso simplemente demostró que ese grupo tenía mucha capacidad, mucha capacidad en todos los sentidos, porque hay cosas que hay que recordar: yo, al año siguiente, llegué a una semifinal, no llegué a una final porque el árbitro se equivocó en una jugada contra Toluca en la cancha, eso tiene que recordarse, no fue solo una vez, nosotros llegamos a una semifinal a punto de llegar a una final, por un gol no llegamos a una final.
Después, cuando queda Justin Campos como entrenador, Justin Campos llega a otra final, ¿entiendes? Entonces es algo que corrobora que no fue suerte, que no fue casualidad, que simplemente nosotros y con toda la gente alrededor de nosotros teníamos capacidad, y eso es una palabra muy clave: capacidad de saber lo que uno hace, de estar bien preparado, estar bien estudiado, estar bien enfocado en lo que uno hace, entonces simplemente ese grupo tenía una gran capacidad, desde nuestro gerente, en ese momento dueño, los gerentes, cuerpo técnico y jugadores.
—¿Qué le parece el actual formato del Mundial de Clubes?
El formato hay que respetarlo, yo creo que, no sé, siento que tal vez así podría haber un poquito más de oportunidad para que un equipo de Centroamérica vaya; pero para mí es un formato interesante.
— ¿Y algún favorito para ganar este Mundial de Clubes?
El Real Madrid, nadie le va a quitar eso.


