Ceferin, sin rivales en su reelección como presidente de la UEFA

El esloveno Aleksander Ceferin, que aspira el jueves en Roma a su reelección como presidente de la UEFA, en una votación en la que es el único candidato, se ha consolidado desde 2016 por su oposición a Gianni Infantino, al frente de la FIFA.

¿Sus principales logros? "La reforma de la gobernanza con la limitación de los mandatos pero también y sobre todo haber mantenido la unidad del fútbol europeo", responden desde su círculo.

Tras tomar el testigo en 2016 de Michel Platini, todavía suspendido, y elegido frente al holandés Michael van Praag, Ceferin, entonces presidente de la Federación Eslovena de Fútbol, llegó un poco por sorpresa a la cabeza de la poderosa confederación europea.

Desde entonces, intenta imponer un estilo sin florituras, lejos de los proyectores a los que le gustaba acercarse a su predecesor francés.

Sin gran margen de maniobra, el esloveno ha intentado dejar su marca y completar un lavado de cara con respecto a la época de Platini e Infantino, antiguo secretario general de la UEFA.

"Vemos en él la voluntad de dar más plaza a los pequeños clubes y naciones, con la creación de una tercera Copa de Europa y de la Liga de Naciones", analiza Didier Primault, director del Centro de Derecho y Economía del Deporte (CDES) de Limoges (Francia).

- Dejar su impronta - 

"Por su balance desde su llegada no le podemos juzgar demasiado. Será después de su reelección cuando tenga que tomar decisiones importantes", analiza un especialista en fútbol europeo. "Algunos esperan estos cambios, otros los temen", añade.

Sospechoso de ser la marioneta de Infantino, que trabajó para su elección desde su llegada a la FIFA, Ceferin quiso liberarse rápidamente. 

Para hacerlo se ha centrado en la Asociación Europea de Clubes (ECA), presidida por el italiano Andrea Agnelli, presidente de la Juventus. 

Esta institución le ha apoyado en su oposición a la ampliación de la Copa del Mundo de Clubes, que pasaría de 7 a 24 equipos, y a la Liga Mundial de Naciones (con promesas de ingresos de 25.000 millones de dólares), principales proyectos de Infantino, que amenazarían directamente a la lucrativa Liga de Campeones y desvalorizarían a la Liga de Naciones, creada recientemente por la UEFA.

"Hay que poner en el activo de Ceferin la operación de apoyo para la unidad de las ligas europeas contra los proyectos de Infantino", señaló otra fuente cercana al esloveno.

- ¿Qué margen de maniobra? -

Si la FIFA tiene la intención de ratificar la ampliación del Mundial de Clubes desde 2021, en marzo en Miami, "¿qué puede hacer Ceferin frente a las otras confederaciones que apoyan a Infantino, así como grandes clubes", señala un conocedor del dosier.

Uno de los credos de Ceferin es mantener el equilibrio competitivo entre clubes y de responder a las expectativas de los pequeños países.

De esta forma lanzó la Liga de Naciones y decidió crear a partir de 2021 una tercera copa europea en la que participen 32 clubes.

"Hará las competiciones de clubes europeos más inclusivas que nunca. Habrá más partidos para más clubes, con más ligas nacionales representadas en la fase de grupos", señaló el esloveno.

Presentado como decisivo para mantener el equilibrio competitivo entre los clubes, el Fair Play Financiero es una herencia de la 'era Platini', puesto en marcha a principios de la década.

Si algunos clubes fueron sancionados, las revelaciones recientes de Football Leaks ponen en cuestión la eficacia del sistema, con clubes como el Manchester City o el París Saint-Germain acusados de intentar sortear las reglas.

Revelaciones que llevaron a la UEFA a anunciar que "si nuevas informaciones sugieren que casos ya clasificados no fueron tratados correctamente, se podrán reabrir".

Para mantener el equilibrio entre los clubes, Ceferin se mostró favorable al 'salary cap' (un techo salarial) pero "¿tendrá los medios para imponerlo a los grandes clubes?", se pregunta un analista.

En ese contexto, el congreso de Roma podría aprobar la entrada controvertida en el comité ejecutivo de la UEFA del presidente del PSG, Nasser Al-Khelaifi, designado como representante de la ECA. Esta nominación es denunciada entre otros por el presidente de la Liga española, Javier Tebas, que estima que la llegada del patrón de la cadena beIN Sports, uno de los principales contribuyentes económicos de la UEFA "viola todas las reglas de buena gobernanza".

"Será interesante ver si Ceferin obtiene en Roma un plebiscito o un consenso suave, porque de esto dependerá su capacidad para tomar decisiones", añade.