Video que eriza la piel: 30 mil ‘fans’ cantaron ‘Primera cita’ con Carin León
La lluvia, lejos de espantar a la gente, se volvió parte del espectáculo: un picante natural, un reto para cantar con el corazón empapado.
Los que habían afinado garganta para gritar cada letra de despecho tuvieron que salvarla comprando capas a la carrera, mientras otros confiaron en el sombrero y las botas para resistir el agua.
La lluvia, lejos de espantar a la gente, se volvió parte del espectáculo: un picante natural, un reto para cantar con el corazón empapado.
A las 7:00 p.m., Carín León apareció sobre el escenario y el Estadio Nacional rugió.
Por tres horas, el mexicano fue el terapeuta de la noche: amor, despecho, cerveza y miles de ticos sanando con letras que dolían y curaban al mismo tiempo.
Según quién, Primera Cita… cada tema era un eco en 30 000 gargantas.
Había parejas abrazadas bajo la lluvia y grupos de amigos cantando como si cada palabra fuera su historia.
El frío se volvió cálido, porque cuando hay desamor y buena música, el clima se rinde.
Carín, cuyo verdadero nombre es Óscar Armando Díaz de León Huez, tiene 36 años, dos hijos y un talento que ha cruzado fronteras.
Ha mezclado su voz con artistas como Maluma y Ricky Martin, llevando el regional mexicano a un nivel que pocos imaginaron.
Por eso hoy es un ícono moderno de su género: auténtico, emocional y sin miedo a mojarse.
En medio del show, se puso la camiseta de La Selección de Costa Rica, se tomó una cerveza nacional y el público se le rindió.
Fue su manera de decir “gracias”, y Costa Rica le respondió con un coro que estremeció hasta las gradas más altas.
Terminó su presentación pasadas las 10 de la noche y, casi sin descanso, partió del país rumbo a su siguiente parada.
Pero lo que dejó aquí no se borra fácil: un estadio lleno, un cielo llorando y un público cantando con el alma.
Y si hay algo que nos queda, más allá del barro, los sombreros y las botas mojadas, es ese video visto desde lo más alto del Nacional, donde 30 mil ticos entonaron La Primera Cita al unísono… (vea el video adjunto en la portada).
Y sí… bajo la lluvia, Costa Rica también tuvo su terapia de amor propio.


