22 de marzo de 2013, 6:57 AM

 Algunos los miraban extrañados y seguían su camino. Otros, se acercaban lentamente pero al final se atrevían a tomarlos. Este fue el panorama en muchos parques de la capital que se unieron a la tercera liberación mundial de libros.

Esta iniciativa consiste en “perder” un libro a propósito y dejarlo en un lugar público. Una dedicatoria en su primera página, indica que el libro no tiene dueño y que es propiedad de la persona que lo encuentre. Una vez que sea leído, la idea es que se libere nuevamente para que otras personas puedan disfrutarlo.

Este jueves el parque Morazán y el parque España se convirtieron en una biblioteca para muchas de las personas que pasaban por ahí.

12 voluntarios del Grupo Nación liberaron 750 libros en los principales parques de la capital. Pero también no faltaron libros perdidos por otros ciudadanos que quisieron unirse a esta actividad, que fue apadrinada por el Ministerio de Educación.

En horas de las tarde, los voluntarios del Grupo Nación liberará más de 100 libros de la colección “leer para disfrutar” en los alrededores de Tibás y Guadalupe.