Miles protestan en Madrid contra restricciones ante coronavirus
"Fuera los bozales, no somos animales", gritaban los participantes en una manifestación que reunió a por lo menos 2.500 personas.
Al menos 2.500 personas se manifestaron en la capital española el domingo, en contra del uso obligatorio de mascarillas y de otras restricciones implantadas por el gobierno para hacer frente al coronavirus.
La manifestación comenzó bajo la enorme bandera española de la plaza Colón, en el centro de Madrid, donde los asistentes ondeaban pancartas en las que se leían frases como "el virus no existe", "las mascarillas matan" o "no tenemos miedo".
Convocada a través de las redes sociales, la concentración reunió "entre 2.5000 y 3.000" participantes, según el cómputo realizado por la policía y notificado a la delegación de gobierno, y en ella se pudo ver a personas sin mascarillas.
Los capitalinos protestaron también contra la gestión del gobierno, al que acusan de "atentar contra los derechos humanos", porque, según los participantes, "las personas sanas no deberían llevar mascarillas", la cual consideran "una auténtica tortura".
Otras muchas portaron pancartas en las que se podía leer consignas como "el sistema controla a través del miedo y la prensa manipula"; "el COVID sí tiene cura pero está prohibida, no quieren protegerte" u otra en inglés que decía "born to be free (nacidos para ser libres)".
Aseguran que miles morirán "pero de hambre"
Las críticas no han quedado ahí, pues también han culpado a las autoridades de crear "una falsa pandemia" y consideran que al finalizar el verano habrán muerto "alrededor de 300.000 al día, pero éstas de hambre".
Así lo dijo el escritor y político ecologista Esteban Cabal que, manifiesto en mano, argumentó: "El virus SARS-CoV-2 todavía no ha sido aislado y purificado. No existe evidencia científica para declarar la pandemia y para afirmar que este virus es patógeno. Además están diagnosticando como enfermos a personas que no lo son", dijo Cabal.
Esta manifestación se celebra dos días después de que el gobierno anunciara nuevas restricciones como el cierre de las discotecas o la prohibición de fumar si la distancia de seguridad de dos metros entre las personas no se puede mantener.
La mascarilla se impuso primero en mayo en los transportes públicos y después se extendió a todos los lugares públicos en este país donde el coronavirus se cobró 29.000 vidas.