Por Susana Peña Nassar |25 de mayo de 2020, 18:20 PM

¿Qué ha pasado con los exsiameses Samuel y Ezequiel? Desde hace varios meses, cuando inició la emergencia nacional por COVID-19, se mantienen en una cuarentena estricta por sus factores de alto riesgo. 

Parte de ese aislamiento lo han vivido en San Vito de Coto Brus, lugar de donde son oriundos sus padres, Evelyn Badilla y Stallin Núñez. Ahí tienen la oportunidad de disfrutar de la naturaleza y de espacios más amplios, lejos de la ciudad.

"La crisis del COVID-19 es un tema que nos preocupa mucho porque nuestra familia, en nuestra casa, todos somos asmáticos y en especial Samuel y Ezequiel que son traqueostomizados, entonces es como tener la puerta abierta hacia los virus", contó su mamá a Teletica.com.

"Hemos tomado todas las medidas que el Ministerio de Salud ha planteado, las hemos tomado muy en serio porque yo no quiero ver a mis hijos hospitalizados y yo estar afuera o en casa guardada, aislada, me podría morir. Por eso, me protejo y los protejo a ellos, igual Stallin", agregó Evelyn. 

En la casa de los Núñez Badilla siempre han existido rigurosas medidas de higiene por la salud de Samuel y Ezequiel, sobre todo después de la cirugía de separación; sin embargo, todos los protocolos se han reforzado debido a la pandemia. 

El control médico también se ha modificado por el confinamiento. Afortunadamente, los gemelos tienen unos seis meses de tener una condición estable, sin complicaciones. 

"En cuanto a la cantidad de citas que tenemos todas se han pospuesto, algunas se hacen de forma telefónica, las que no son de emergencia se han pasado para los meses de septiembre, octubre, diciembre, incluso en enero de 2021. Los médicos han estado al tanto de todo, me llaman y están ahí preocupados por el bienestar de nosotros, todos sabemos que ellos son niños de alto riesgo", comentó Badilla. 

Aprovechan el tiempo en casa

La mamá de Samuel y Ezequiel aseguró que aprovechan el tiempo de cuarentena para la estimulación de sus hijos. Esta tarea la comparten con las maestras del Hospital Nacional de Niños, pendientes del desarrollo de los niños de cuatro años.

Dos años y tres meses después de la separación, los hermanos Núñez Badilla han dado pequeños pasos que llenan de alegría a su familia.

"Samuel y Ezequiel están muy contentos, alegres, el semblante de ellos es de niños felices, han subido de peso, la alimentación ha mejorado mucho, estamos aprovechando estos días de cuarentena para estimularlos bastante", concluyó su madre.