Por Gloriana Casasola Calderón |12 de julio de 2020, 12:47 PM

Costa Rica le perdió el rastro al COVID-19. El aumento acelerado de casos sobrepasó la capacidad del personal de salud para notificar a todas las personas con resultado positivo o en contacto con pacientes positivos por el virus.

El uso de herramientas tecnológicas surge como un salvavidas ante ese escenario.

Este tipo de aplicaciones realizan un registro de las aproximaciones entre los celulares por medio de Bluetooth.

De esta forma se podría ampliar la capacidad del Ministerio de Salud para dar trazabilidad a los casos de COVID-19.

Eso sí, el uso de esta tecnología sería voluntario y cada usuario debe dar su consentimiento.

Además, se garantiza la protección de los datos personales, es decir, al generarse la alerta no se indicaría el nombre de la persona contagiada con la que se estuvo en contacto.

Pese a que meses atrás el Ministerio de Ciencia y Tecnología impulsó esta iniciativa, el proyecto quedó en el papel.

Desarrollar una aplicación de este tipo tomaría menos de un mes, incluso en el mercado hay aplicaciones listas a disposición de los gobiernos.

Países como Singapur, Australia, Japón y Alemania utilizan este tipo de tecnología.