Herediano armó la fiesta en el mismo lugar donde cinco meses atrás vivió llanto
Los florenses perdieron en diciembre la opción de disputar el título en la Cueva. Este domingo se desquitaron con un efusivo festejo en el camerino
Era diciembre del 2016. Dentro del camerino visitante del Ricardo Saprissa, Hernán Medford vociferaba a más no poder en contra del arbitraje. A él se le unió la molestia de todo un equipo, incluyendo jugadores y directivos.
Aquella noche, Herediano perdió ante Saprissa la cuadrangular y por ende, el título nacional.
Esa noche hubo lágrimas, colerones, puertas golpeadas y más de un reclamo.
Cinco meses después, en el mismo camerino, la historia fue distinta…
Solo con el pitazo final, los florenses salieron en carrera al camerino, sí, ese mismo en el que habían derramado lágrimas cinco meses atrás.
Allí los esperaba Orlando Moreira y Aquil Alí, la cúpula de la directiva. Uno a uno se uniendo al abrazo masivo. Cánticos y celebraciones, esta vez el camerino vivió una de las páginas más dulces para un equipo visitante.
Luego se dio paso a la privacidad y con los gritos efusivos del “Heredia, Heredia” la puerta se fue cerrando a la prensa.
Una vez adentro, e imaginamos por la música y los gritos de los jugadores, comenzó la verdadera fiesta.
En la cancha, la Ultra morada no paraba de alentar a los jugadores morados que recogían cabizbajos las medallas de subcampeón, todo bajo una fuerte lluvia como para poner más dramático el asunto.
Entre pocas banderas rojiamarillas y un desolado Ricardo Saprissa, Herediano salió a levantar la copa, algo histórico, pues era al único rival que no había podido vencer en una final y mucho menos en su Cueva.
Fue inevitable observar el podio lleno de sombrillas para taparse de la lluvia, pese a que la celebración era para un torneo de Verano.
El intento de vuelta olímpica terminó con jugadores sangrando tras el lanzamiento de objetos desde un sector de la grada.
También el espectáculo se vio afectado por la invasión de un aficionado que llegó a agredir al florense José Sánchez y que de inmediato fue sacado por la escolta de seguridad.
Herediano se trasladó pasadas las 6 p. m. a Heredia, donde la afición los espera abalanzados en las calles para comenzar el festejo en su terruño.