Por José Fernando Araya |9 de diciembre de 2015, 11:27 AM

Juego de ilusiones. De amores y desamores. De óperas dramáticas para la afición brumosa.

En un cierre no apto para cardíacos, Cartaginés empató 1-1 ante Alajuelense y se despidió del Torneo de Invierno 2015, más por los otros resultados, que por lo visto en la cancha ante el cuadro rojinegro.

Los blanquiazules se despiden del certamen con la culpa de despertarse tarde, pese a la insistencia de la afición del Cartaginés de bajar santos para encontrar una ayuda divina en los últimos minutos.

Del otro lado de la cera, risas de alegría, pero poca confianza. Alajuelense amarró un liderato entre dudas y solo gracias a un traspié del Herediano ante el débil Belén.

Los manudos comenzaron mejor el partido y asestaron dos primeros sustos al arco defendido por el brumoso Alejandro Gómez que salvó a los locales.

Pero para alegría de los feligreses blanquiazules, Fabrizio Ronchetti apareció a buena hora con un remate de cabeza en el área pequeña para abrir el marcador al minuto 22.

Un gol que invitaba de par en par a la ilusión. Que hacía creer en la clasificación brumosa, más que al mismo tiempo Limón FC perdía en el Valle de El General.

Pero el boleto se escurrió como el agua entre las manos.

Para la complementaria, Alajuelense mostró su mejor cara y puso contra las cuerdas al Cartaginés.

Fue hasta que Allen Guevara aprovechó un error defensivo de los locales para colocar así el 1-1 definitivo que amarró el liderato rojinegro.

Todavía con el empate la afición brumosa podía soñar con la clasificación, pero la figura de Erick Scott emergió como figura en otro escenario para sentenciar, una vez más, el cruel destino del Cartaginés. 

El pitazo final solo puso en evidencia la cruel realidad de dos destinos completamente distintos: de un lado lágrimas en la grada del estadio Fello Meza... por otro carnaval en el Caribe que vivirá unas semifinales entre los equipos grandes.