Por Julio Naranjo |12 de noviembre de 2020, 8:24 AM

Costa Rica tiene solo dos exponentes del ciclismo de ruta con licencia World Tour de la Unión Ciclista Internacional (UCI), exclusiva para los mejores equipos y sus respectivos integrantes.

El presente es Andrey Amador, ciclista de la prestigiosa agrupación británica Ineos Grenadiers desde hace un año y donde logró mantener el protagonismo que tuvo por once años en Movistar.

Amador finalizó este domingo su cuarta Vuelta a España y vigesimoséptima Grande (incluyendo Tour y Vuelta), lo que le permitió convertirse en el ciclista latinoamericano con más carreras de este tipo superando al colombiano, Rigoberto Urán.

Con 34 años y muy consciente de sus características, el tico se luce en carretera con su papel de gregario, dejando en un segundo plano cualquier triunfo individual para sumar sus galones en función de alguna de las luminarias del equipo.

Luego de lo demostrado esta primera temporada, donde fue elegido entre los 30 ciclistas de la planilla para Tour y Vuelta en un mismo año, no cabe duda que el tico podrá seguir agrandando su leyenda en grandes vueltas en los dos años que le quedan de contrato asegurado.

Incluso, dependiendo del calendario que le formulen, podría volver a competir en el Giro de Italia, su competencia favorita, donde se podría escribir una página histórica para el ciclismo nacional si Kevin Rivera, el futuro, también es considerado en su equipo.

El oriundo de Pacayas de Cartago vestirá la próxima campaña los colores del equipo Bardiani CSF Faizané, con el objetivo principal de entrar en la nómina de ocho ciclistas para la Corsa Rosa.

Rivera, de 22 años, es un ciclista de cualidades distintas a las de Amador, ya que su mejor desempeño se presenta en la alta montaña y podría asumir funciones de capo.

Incluso, de lograr explotar su calidad, Rivera podría optar a más triunfos individuales que el propio Andrey, ya muchas carreras se deciden cuando la cuesta se pone más empinada.

Su pasta de líder ya la demostró en competencias como Vuelta al Táchira y el Tour de China, pero ahora deberá medir sus piernas entre lo que más vale y brilla del ciclismo.

“Mi objetivo es traer victorias importantes al equipo y poder participar, mereciendo la convocatoria, en el Giro de Italia 2021 para ponerme a prueba en una de las carreras por etapas más importantes del mundo”, afirmó Rivera en el momento que estampó la firma.

Amador y Rivera, dos ticos presentes donde muchos quieren, pero pocos alcanzan el objetivo y se mantienen.