Padres de niños que piden dinero en la calle recibirán castigo
Un proyecto busca imponer penas de dos años de cárcel por mendicidad.
Una realidad que viven muchos: Carolina González, junto a su hija, pide dinero en un semáforo en Sarchí, Alajuela, para reunir lo suficiente y regresar a Venezuela. Aquí, lo más difícil es para la niña, quien debe permanecer con sus padres bajo el sol, la lluvia y, en ocasiones, soportar el hambre (ver nota completa en el video adjunto).
La migración es uno de los problemas sociales que más afecta a la niñez. Muchos menores terminan en las calles, pidiendo dinero con sus padres.
Un proyecto de ley busca sancionar a los padres que expongan de esta manera a sus hijos, con penas de prisión que van desde seis meses hasta dos años.
“Agravándose en el caso en que el niño tenga una discapacidad, se identifique que se les hace violencia o también cuando exista repetición de este actuar; también el PANI y el IMAS estarán debidamente informados para que hagan lo que corresponde”,
explicó la diputada Luz Mary Alpízar, proponente de esta iniciativa.
Actualmente, instituciones como Unicef y la Fundación Lloverá trabajan en conjunto para ofrecer techo a los hijos de migrantes, quienes son las principales víctimas de la mendicidad. Estas organizaciones tienen capacidad para atender a 40 personas, principalmente menores de edad, que permanecen en resguardo mientras sus padres salen a trabajar.
Sin embargo, no todo parece ser tan alentador. El Patronato Nacional de la Infancia reportó al menos 400 casos de mendicidad infantil atendidos el año anterior. En estos escenarios, se realiza un llamado de atención a los padres sobre el peligro de esta práctica.
No obstante, expertos advierten que imponer penas de hasta dos años de cárcel no resolverá el problema, ya que no se trata de una sanción privativa de libertad.
“Si lo que se desea es enviar una prevención general negativa sobre este tipo de conductas, el proyecto debería además de acompañarse de que exista una vigilancia por parte del PANI y que si los padres son reincidentes, inmediatamente se tendría que buscarles una persona que los cuide mejor o alguien que se haga responsable”, dijo la abogada penalista Angie Arce.
Si usted observa a un niño pidiendo dinero en las calles, puede denunciar al 9-1-1 para contribuir a la solución de un problema que afecta a toda América Latina.