Elecciones en Holanda: encuestas a boca de urna dan mayoría al primer ministro; el ultraderechista Wilders, peor de lo esperado
Las primeras encuestas de boca de urna de las elecciones en Holanda dan como fuerza ganadora al partido del primer ministro, el conservador Mark Rutte, por delante del ultraderechista Geert Wilders, que comparte el segundo lugar con otras dos fuerzas.

Las primeras encuestas a boca de urna de las elecciones en Holanda dan como fuerza ganadora al partido del primer ministro, el conservador Mark Rutte.
Con un nivel de participación muy alto, el gobernante, según los principales sondeos, queda por delante del ultraderechista Geert Wilders, que comparte el segundo lugar con otras dos fuerzas.
Según la televisión pública NOS, de los 150 escaños, 31 se proyectan para el partido liberal de derecha VVD, del primer ministro, y 19 para el Partido por la Libertad de Wilders, los mismos que los democristianos y Demócratas 66.
Este resultado, de confirmarse, resulta mucho peor de lo esperado para Wilders, al que algunos sondeos de intención de voto llegaron a darle 30 escaños.
Las elecciones en Holanda han despertado más interés internacional que nunca al ser vistas como cruciales en el futuro de la Unión Europea.
Esto, después de la victoria de Donald Trump en Estados Unidos y el voto a favor de salirse de la Unión Europea en Reino Unido, el conocido "Brexit", y antes de los comicios en Alemania y Francia.
En la sede del Partido Verde se vieron escenas de celebración: es el que más crece.
Rutte había planteado la elección como la disyuntiva entre la continuidad que él representaba y el caos que iba a traer al país Wilders, al que tachaba de extremista no preparado para gobernar.
En un clima de polarización y desencanto con los partidos tradicionales, el ascenso de Wilder, que pasaría de 15 a 19, da una idea de hasta dónde están dispuestos a llegar los votantes para expresar su indignación.
En cualquier caso, las posibilidades de que Wilders se convirtiera en primer ministro en todo momento parecían remotas por el sistema parlamentario de representación proporcional que rige en el país y que favorece los gobiernos de coalición.
Los demás partidos habían descartado formar parte de una coalición liderada por Wilders y su discurso en contra de los inmigrantes, el islam y la Unión Europea.
Los sondeos señalan que la recuperación económica y su mano dura al gestionar el reciente roce diplomático con Turquía le sirvió al primer ministro para ganar apoyos.
Según el boca de urna, el gran derrotado es el Partido Laborista del eurodiputado Jeroen Dijsselbloem, que pasaría de 38 diputados a 9 si se confirmara el resultado.
En cambio, en la sede del Partido Verde se vivieron escenas de celebración ante la proyección de que dobla sus escaños hasta llegar a 16.


