Puntarenas iguala la serie ante Coopenae ARBA
Tras ceder una ventaja de 21 puntos en el primer juego, PFC Basketball igualó la serie en San Ramón (80-91) para forzar el decisivo juego 3 en casa y buscar un boleto en la final.
Por Julián Blanco.
El baloncesto, como todo deporte, es de los jugadores. Pero el baloncesto, como buen deporte, no solo se queda ahí. Es en noches como la del juego 2 entre PFC Basketball y Coopenae ARBA algo se siente distinto, donde las aficiones pasan de papeles secundarios a protagonistas y donde, sumidos en ese ambiente, los propios jugadores sienten el peso de una semifinal.
Ahí se derrumbó Puntarenas en el juego 1, cuando un primer cuarto de 30-9 a favor se convirtió en una derrota 65-73 que Coopenae ARBA recibió de brazos abiertos. La oportunidad de cerrar la serie en San Ramón estaba a pocos días, pero una vez ahí, con cerca de mil personas en el Gimnasio Rafael Rodríguez, los hermanos Daniel (32 puntos, 5 rebotes, 5 asistencias) y David Shedden (23 puntos, 9 rebotes) aparecieron para igualar todo.
Los Pelícanos de Puntarenas se adelantaron, desde el inicio, otra vez. A ratos por 10 puntos, otras veces por 8 e incluso a 6 de diferencia, pero la realidad es que en esta ocasión no hubo espacio para sorpresas. En cambio, lo que abundó fueron gritos de las aficiones –algunos de aliento y otros un tanto más reprochables– que incluso obligaron a parar el partido en más de una ocasión.
La más significativa: un encontronazo de un aficionado a nivel de cancha con Daniel Shedden. El jugador porteño recibió una, pongámoslo así, notable cantidad de improperios a los que decidió responder de la forma más retadora posible: escuchándolos tranquilamente. Eso sí, la afición puntarenense se lanzó a acuerpar a Shedden desde la gradería y el juego se detuvo casi 10 minutos hasta que se pudo cerrar la primera mitad con marcador 50-56 para los visitantes.
El tercer periodo inició bastante errático de ambos lados, pero pronto volvieron a hacerse notar las figuras. En Pelícanos, los mencionados Shedden más un Justin Pierce que sumó muchísimo con su liderazgo (15 puntos, 9 rebotes). En ARBA, Nicolas Thomas asumió el liderazgo de su equipo con 27 puntos (claves para acercar el marcador), acompañado de Víctor Arias con 20 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias. Lejos quedó Jacque Brown, figura indiscutible del primer partido, con apenas 10 puntos.
Finalmente, el último parcial fue el más flojo del encuentro. Cada equipo anotó 14 puntos, suficientes para que Puntarenas mantuviera la ventaja tan sostenida de toda la noche. Entremedias, dos aficiones que se hicieron presentes y llenaron de emociones al cantón ramonense. “Eso es lo que todo jugador de básquetbol quiere: una afición así, que se meta al juego, que mantenga el partido animado”, comentó Víctor Arias tras el partido.
A la espera quedan los seguidores de un Juego 3 que no promete menos. Para Puntarenas, una oportunidad dorada en su primera temporada en la máxima categoría: “La afición de nosotros siempre ha sido fiel, estamos en deuda con ellos”, concluyó David Shedden.
