Ian Martínez confía en su talento para derribar barreras del baloncesto tico
"No soy el primer buen jugador de Costa Rica, solo soy el afortunado que tuvo la oportunidad de jugar en una gran escuela”, mencionó el base de Maryland.
El jugador costarricense, Ian Martínez, ya palpita lo que será su debut con la Universidad de Maryland en lo que será su segundo año en el baloncesto universitario de la NCAA.
El base nacional se siente capacitado para romper esquemas en el deporte de los aros para Costa Rica, país que pone sus hombros la esperanza más cercana de tener por primera vez un representante en la NBA.
“Es una bendición ser el primero en hacerlo. No soy el primer buen jugador de Costa Rica, solo soy el afortunado que tuvo la oportunidad de jugar en una gran escuela”, mencionó Martínez en un artículo compartido por su universidad.
Martínez recuerda con cariño sus raíces heredianas y destaca la oportunidad de ser un ejemplo para futuras generaciones en el deporte.
"Tenemos el talento para ser grandes. Tal vez verme en la televisión ayude a demostrarles que es posible. Una cosa es hablar de ello, pero otra es ir a hacerlo y lo quiero lograr”, explicó Martínez, quien jugó la temporada pasada para Utah.
Uno de los jugadores que le servirá de inspiración es el angoleño, Bruno Fernando, a quien pudo conocer durante el campamento en Maryland, de donde surgió para llevar su bandera a la NBA.
"El baloncesto es un juego global ahora. Hemos visto a muchos jugadores de muchos países diferentes jugar en la universidad o ir directamente a la NBA, y están demostrando que es posible. Creo que mientras siga mejorando, también podría llegar muy lejos”, comenta el tico.
Orgullo latino.
En el campo universitario, cuna de grandes deportistas, Martínez también se destaca por ser el único atleta hispano en Maryland nacido en un país latinoamericano, algo que lo llena enormemente de orgullo.
"Es genial que Maryland reconozca la cultura hispana de esa manera. Estoy muy orgulloso de quién soy y de dónde vengo, así que me alegro de que la universidad también esté orgullosa", acotó.
En cuanto a su función rotativa en la cancha, Martínez espera alcanzar su máximo nivel para demostrar ser influyente tanto en ataque como en defensa para ir en busca de la mayor cantidad de triunfos.
“Puedo disparar, puedo hacer jugadas y daré todo lo que tengo en defensa. Voy a hacer lo que el entrenador Turgeon me pida y solo ayudaré a este equipo a ganar partidos de baloncesto", concluyó el jugador de 1.91 m de estatura.
