26 de marzo de 2013, 7:00 AM

Las bodegas de las autoridades antidrogas encierran el lujo y la extravagancia en la que vivían quienes ahora están arrestados por narcotráfico. Todos estos bienes podrían ser vendidos o donados para mejorar el combate al trasiego de drogas, pero tan solo los vehículos pueden ser aprovechados, ya que un error en la Ley de Delincuencia Organizada hace imposible hacer lo mismo con muebles, joyas o las casas decomisadas.