Por Luis Jiménez |19 de agosto de 2020, 16:24 PM

Un ciclista de 24 años, apellido Olivera, conversó con Teletica.com sobre el video que circula en redes sociales, en el cual se le ve quebrando los retrovisores, parabrisas y algunas ventanas de un autobús de la empresa Lumaca de Cartago.

Los hechos ocurrieron este martes a eso de las cinco de la tarde en Curridabat, frente al centro comercial Plaza del Sol; pero fue hasta este miércoles que la grabación se difundió en diferentes plataformas digitales.

El joven es oriundo de San José, soltero y trabaja en una construcción.

“Yo cuando salgo de mi trabajo siempre tomo la misma ruta en mi bicicleta, pasando por la antigua Galera y siguiendo por Plaza del Sol. Ayer, y como siempre lo hago, circulaba por la orilla de la vía, cuando voy llegando al centro comercial el chofer del bus me rebasa, me tira la unidad encima, sin fijarse si ya me había pasado; me golpea con la cola tirándome hacia la acera donde hay unos tubos. Cuando los veo, intento no chocar, pero veo las llantas que van muy cerca y si caía me aplastaban, por eso luego a como pude me estabilizo y caigo en la calle”, dijo Olivera.

El joven asegura que por suerte no venía un carro detrás del bus porque lo hubiera atropellado.

“Atrás mío vienen dos ciclistas y vieron lo que ocurrió, el señor del bus no frenó y se detuvo en la parada a unos 35 metros de donde fue el accidente. En ese momento me hierve la sangre y más aún cuando veo mi pierna ensangrentada y la bici con varias partes quebradas”, cuenta.

“Yo me levanté y alcancé al bus en el semáforo, cuando llegó otro ciclista le estaba reclamando y él (chofer) como si nada hubiera pasado, por eso yo coloco la bici frente al bus y en mi estado de ira y cólera lo insulté, le enseño los golpes y me dice que disculpe y que por dicha estoy bien”, afirma el joven.

“¡Cómo me va a decir que estoy bien! Lo que hizo fue cerrar la ventana y si en ese momento él hubiera estado fuera del bus yo lo mato, pero seguro pensó que como estaba dentro del bus yo no iba a hacer nada”, afirmó en su conversación con este medio.

Según Olivera, en ese momento lo mejor fue tomar la justicia en sus propias manos porque, para él, en este país "las leyes no sirven para nada" y los conductores siempre hacen lo que quieren con los ciclistas.

“Pensé en llamar a la Policía de Tránsito, pero siempre duran muchos meses para ir a juicio y lo que me darían sería muy poco dinero para poder arreglar mi bici”, dijo.   

Además, cuenta que “lleno de ira arranqué las dos escobillas del parabrisas y con un hierro que tienen me fui a darle a él por la ventana del chofer, quebré los dos parabrisas, la puerta y los retrovisores”.

Oliveira asegura que sabía que lo iban a grabar con los teléfonos celulares, pero no creyó que se fuera a volver tan viral y más aún cuando hoy por la mañana tenía miles de mensajes en Facebook de amigos que lo reconocieron.

“Yo fui la víctima del atropello, pero con esto que hice ahora voy a ser el malo de la película”.

“Los choferes y empresarios de esa empresa no van a decir 'pobre el muchacho, paguémosle la bici y que vaya a la mejor clínica privada para que lo atiendan como rey'. Yo sé que me andan buscando para demandarme, pero si lo tengo que afrontar lo hago”, indica.

También aseguro que “si me dicen que voy a ir preso por lo que hice, eso es lo de menos, porque en la cárcel dan comida y hasta clases”.

“Los autobuseros deben de tener más conciencia con los que andamos en bici por la orilla y respetarnos”, finalizó.  

Teletica.com intentó conocer las acciones que tomaría la empresa Lumaca, pero tras varias llamadas no fue posible obtener una reacción.