Por Mariela Montero Salazar |14 de julio de 2020, 14:50 PM

El uso de mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento social, así como otros hábitos de higiene adoptados para enfrentar la pandemia del COVID-19, han disminuido la circulación de virus estacionales en el país.

En este momento se registra la circulación de influenza AH1N1, influenza tipo A y B, parainfluenza, rinovirus, adenovirus y enterovirus; sin embargo, la proporción aún es baja, confirmó la jefa del área de Salud Colectiva de la CCSS, Guiselle Guzmán.

“Hemos visto que las medidas de prevención no solo han ayudado a disminuir la cantidad de casos por COVID-19, sino que han retrasado la circulación de otros virus respiratorios, lo cual es muy positivo”, dijo la funcionaria.

Aun así, la vocera aseguró que en el plan de expansión de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), para atender el crecimiento hospitalario de casos COVID-19, también se contempla a pacientes que requieran internamiento por otros virus.

“Hemos proyectado también la posibilidad de que estos casos vengan a engrosar la lista de personas que requieran atención y hospitalización. Dentro de las proyecciones de expansión está el tener un requerimiento de camas para atender este número de enfermedades respiratorias”.

La detección de los virus respiratorios estacionales se realiza a través de las unidades de vigilancia centinela. Estos son establecimientos de salud donde se toman muestras a pacientes con cualquier tipo de infección respiratoria, se procesan para coronavirus y para cualquier otro tipo de virus respiratorios.