Por Luis Jiménez |9 de julio de 2020, 13:25 PM

Román Macaya, presidente ejecutivo de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), anunció este jueves el “Plan Expansión”, el cual contempla tres etapas para abrir diferentes capacidades de hospitalización en el país. 

El objetivo principal de esta estrategia, analizada por la Junta Directiva de la institución, es atender las necesidades de los pacientes COVID-19, darle continuidad a pacientes que no tienen el coronavirus y, por último, maximizar el uso eficiente de los recursos de la Caja en infraestructura, humano, financiero, entre otros.  

Esto permitirá crecer hasta en 159 camas de cuidados intensivos (UCI) y 134 camas de manejo moderado.

“La institución viene trabajando desde el inicio de la pandemia para atender el incremento de personas que demandan hospitalización, ya sea en salón, cuidados intermedios o críticos, y con esta decisión se definen las acciones a seguir en los próximos días y semanas”, dijo Macaya.

La estrategia permitirá ampliar la capacidad de respuesta de la Caja ante el crecimiento de casos de COVID-19 en todo el país.

“Los hospitales San Juan de Dios, Calderón Guardia y México darán paso a un crecimiento de sus unidades para la atención del coronavirus mediante la reconversión de camas en salón y la habilitación de espacios nuevos para UCI”, agregó el jerarca.

​Actualmente, el Hospital San Juan de Dios tiene siete camas UCI para COVID-19 y 30 de cuidados moderados, con este plan sumará nueve camas más para pacientes graves y 12 para moderados.

En el Hospital México hay 12 camas UCI y 22 de manejo moderado, se agregarán 10 camas más UCI y 30 del otro tipo. 

El Calderón Guardia añadirá hasta 24 camas UCI y 15 de manejo moderado.

“En este momento estamos a punto de agotar la primera etapa, que es la respuesta con la capacidad ordinaria y estamos trabajando ya para entrar a la fase dos, denominada de capacidad expandida en hospitales nacionales”, indicó.

Macaya considera, además, que “ninguna expansión hospitalaria será suficiente para responder ante el COVID-19, si los ciudadanos no asumen su responsabilidad de acatar las recomendaciones de salud pública”.