Por Julio Naranjo |6 de julio de 2020, 12:29 PM

Marineros de Puntarenas se convirtió en nuevo equipo de la Liga de Ascenso, luego de que un grupo de empresarios locales invirtieran en la compra de la franquicia que originalmente pertenecía a la Universidad de Costa Rica.

Marineros se convierte así en el equipo más reciente que tendrá chance de jugar gracias a una negociación económica y sin la necesidad de competir en la cancha para lograr un cupo en el fútbol costarricense.

Sin embargo, durante los últimos años los cambios de franquicias se han convertido en gestiones recurrentes, tanto en la Segunda División como en la máxima categoría.

El caso de Marineros llega precedido por los acuerdos que habían realizado los equipos de Municipal Garabito y la Asociación Deportiva Rosario durante la temporada 2019-2020 de la Liga de Ascenso.

Debido a diferencias y falta de apoyo por parte de la Municipalidad de Pérez Zeledón, en enero de 2019 AS Puma decide trasladar su franquicia para el Torneo de Clausura y jugar bajo el nombre de Municipal Garabito.

Para esa misma campaña, la Asociación Deportiva Rosario de Naranjo adquirió el 7 de abril de 2019 la franquicia del CS Once de Abril, equipo filial de Liga Deportiva Alajuelense luego de una negociación directa con el conjunto manudo.

Otro de los equipos que juega en segunda con una franquicia comprada es Curridabat FC, equipo que se fundó en junio del 2016 luego de que una familia de la zona adquiriera los derechos del Municipal Osa.

Primera División.

Con el descenso de La U Universitarios, el único equipo que se mantiene compitiendo con estas condiciones en la máxima categoría es el conjunto de Guadalupe FC.

En mayo de 2017, tras seis temporadas en Primera División, Belén FC desapareció para dar lugar al conjunto guadalupano que hoy dirige Geiner Segura y juega como local en el ‘Coyella’ Fonseca.

Otros de los casos que llamaron la atención años atrás fue la conversión en el 2004 del equipo de Santa Bárbara a lo que hoy conocemos como Puntarenas FC, oncena que se desempeña actualmente en la Liga de Ascenso.

Tampoco se puede olvidar lo realizado por Liberia Mía, equipo que ganó el título de Verano 2009 en Primera División y luego, debido a problemas económicos, dicha franquicia tuvo que ser devuelta a Barrio México en segunda.

Vale la pena recordar además lo hecho por Brujas FC, equipo que estuvo en la división de honor desde su creación en el año 2004 hasta su desaparición en el 2011.

Brujas, que ganó el cetro de Invierno 2009, surgió de la compra de la franquicia del equipo de Guanacasteca y que tuvo, en primera instancia, su sede en Escazú y luego en Desamparados.

Luego, esta franquicia fue vendida a Orión FC, que en el 2011 pertenecía al empresario español Juan Luis Hernández Fuertes.

*Datos de Daniel Calderón/ Teletica Deportes.