Por Natalia Jiménez Segura |2 de julio de 2020, 15:17 PM

Tras las declaraciones del ministro de Salud, Daniel Salas, acerca de la situación con la paciente fallecida ayer por COVID-19, la familia desmintió al jerarca y aseguró que los hechos no ocurrieron así.

Salas hace referencia a que el Ministerio de Salud y la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) se comunicaron con una nieta de la víctima, informándole sobre el diagnóstico positivo.

Sin embargo, la familia insiste en que eso es falso. Contaron a Teletica.com que tuvieron que hacer las llamadas para averiguar lo ocurrido y fue un colaborador del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) el que les informó que la adulta mayor sí era positiva.

“A la nieta que el ministro se refiere es a mi prima, fue la que llamó al OIJ y el compañero del OIJ fue el que le pasó el dato a ella, que sí era positivo. Nosotros tenemos la llamada donde fuimos nosotros los que llamamos para coordinar porque nos decían que Fuerza Pública, que OIJ”, aseguró Ligia Soto, otra nieta de la víctima.

“Ni el hospital ni el Ministerio se comunicaron con nosotros, si nos informaron fue porque ella (prima) llamó a un señor del OIJ y él nos dijo 'si, ella salió positivo' porque nosotros hicimos la llamada, no porque ellos nos llamaran a nosotros”, añadió.

El ministro Salas aseguró que, probablemente, no todos los allegados de la mujer estaban enterados y atribuyó esto a una falla en la “comunicación familiar”.

“Ya el asunto de la comunicación interna y estar seguro que todos los familiares estén enterados, justamente existe ahí. (…) Casos como estos no quisiéramos que ocurran, en este caso hubo una disensión entre los familiares, pero claro que si cuando yo le digo que hubo comunicación es porque tenemos toda esa realimentación de los niveles regionales y locales”, dijo en conferencia de prensa.

La familia confirmó que la primera comunicación que tuvieron ellos con el Ministerio de Salud fue a las cinco de la tarde, cuando la víctima había fallecido desde el mediodía. 

“Yo entiendo el punto de vista de ellos, obviamente no quieren quedar mal, pero no le corresponde al OIJ llamarnos, nos están comunicando por hacernos el favor. Tenemos el nombre y los datos del señor del OIJ y él dijo: 'si tengo que aclarar que ustedes fueron los que me llamaron para que les averiguara, con mucho les puedo colaborar'”, concluyó Ligia Soto.

​La adulta mayor de 71 años, vecina de Alajuela, falleció en su casa de habitación este miércoles.