Por Juan José Herrera |2 de junio de 2020, 19:14 PM

La calificadora de riesgo Moody’s rebajó nuevamente la calificación financiera de Costa Rica pasándola de “estable” a “negativa”.

Se trata de un nuevo golpe a la imagen del país luego de que en febrero anterior pasara de B1 a B2. 

En aquel momento el exministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, le confirmó a los diputados que la rebaja le costaría al país alrededor de $250 millones por año.

“La rebaja refleja el incremento en el riesgo de financiamiento de Costa Rica debido al aumento en los requisitos de préstamos como resultado de los golpes económicos y fiscales de la pandemia”, cita el comunicado de Moody’s.

Hace unas semanas la firma Fitch Ratings también bajó la nota de Costa Rica de B+ a B.

Estas calificaciones son importantes pues los organismos internacionales financieros se basan en ellas para definir las condiciones crediticias en las que otorgan sus préstamos.

Una nota más baja supone un mayor riesgo de que los países no puedan honrar dichos préstamos, lo que obliga a elevar intereses y con esto impactar la deuda pública de las naciones.