Por Juan Manuel Vargas |8 de mayo de 2019, 2:31 AM

La falta de un centro de monitoreo prometido por el Gobierno hace que el escáner de la nueva terminal en Moín no se esté utilizando.

Este equipo con un costo de 2 millones 600 mil dólares no se está aprovechado como se debería y las principales afectadas son las exportaciones nacionales a los Estados Unidos.

Con el escáner se cumpliría con una revisión previa de los productos que se mandan a aquella nación, lo que reduce en hasta 48 horas su ingreso a ese país.

El escáner no se está utilizando por la falta de un centro de monitoreo.

El escáner es funciona desde octubre anterior, cuenta con todos los permisos de ley y el Gobierno se comprometió en tener para febrero el centro de monitoreo, pero esa promesa aún no se cumple.

A dicho centro se enviarán las imágenes para revisión de las autoridades de seguridad, aduanas, Ministerio de Agricultura (MAG) y salud.

El Consejo Nacional de Facilitación de Comercio (Conafac) fue el designado por el Gobierno para la instalación de dicho centro, el cual incluso contará con el apoyo de los Estados Unidos para su implementación.

Cuando el servicio de escaneo se habilite en el país, los exportadores ahorraran tiempo y dinero al poder contar con un servicio que en suelo tico les costará 29 dólares por contenedor.