Por Luis Jiménez |24 de febrero de 2018, 5:53 AM

Este sábado minutos después de las 11 de la mañana parte del equipo médico especialista presente en la operación de separación de los siameses Samuel y Ezequiel (unidos por la cabeza) brindó detalles sobre el procedimiento llevado a cabo por 20 horas, el cual inició el viernes a eso de las 7:40 de la mañana y finalizó a las 2 a.m. del sábado.

Olga Arguedas, directora del Hospital Nacional de Niños, en conjunto con Jaime Cortés jefe de Cirugía, además de Juan Luis Segura jefe de Neurocirugía y Cinthya Mora, jefe de servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva, consideran la operación como exitosa la realizada por todo el equipo involucrado en este hecho histórico para el país.

“Este es un hecho sin precedentes de hacer una cirugía de altísima complejidad, ahora viene el proceso de sacarlos adelante y recuperación, sin embargo, estos niños salieron muy bien. El día de ayer (viernes) fue un día especial donde nos esforzamos para hacer lo mejor”, indica Olga Arguedas.

Por su parte, Jaime Cortés jefe de cirugía del hospital de Niños afirma que, “este es un reto muy grande desde el punto de vista quirúrgico y debemos aprovechar esa oportunidad para reconocer a la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), sin la cual una cirugía de este tipo en un país como el nuestro no sería posible”.

Este equipo integrado por muchísimas personas realizó una labor titánica en el centro médico porque además de este complejo procedimiento, cumplieron con todas las demás cirugías programadas en el hospital.

“Fue algo extraordinario en nuestro país y a nivel mundial. Se logró un cierre racionable de las heridas de los niños. Seguimos en un periodo crítico pero seguiremos adelante”, señala Cinthya Mora, jefe servicio Cirugía Plástica y Reconstructiva del hospital de Niños.

Los niños están en un sueño inducido y así seguirán por lo menos hasta el lunes.

Según señalan los médicos especialistas, durante la separación hubo momentos críticos con los niños pero gracias a todo el equipo presente se logró sacar adelante. El principal factor de riesgo es el sangrado porque hay arterias y venas que están compartidas.

“Samuel estuvo muerto por un momento pero los anestesiólogos lo lograron sacar adelante. Al estar pegados por la cabeza lo que le pasaba a uno le podía pasar al otro”, indica Segura jefe de Neurocirugía.

Ezequiel tuvo también un problema al almacenar líquidos pero “son parte de los procesos complejos como estos”.

Segura también señala que, en los procesos quirúrgicos se utilizan litros de sangre pero en esta ocasión fueron galones.

Sobre la recuperación, datos exactos no pueden dar los médicos, sin embargo hay uno de ellos que ya se está moviendo. Van a necesitar más cirugías a cargo de los cirujanos plásticos.

Además van a requerir de la presencia de sus papás durante los próximos meses, según indica la doctora Arguedas.

La Caja confirmó que la separación de los menores se realizó a las 12:16 a.m. del sábado y la operación terminó pasadas las 2 a.m.

En este procedimiento participaron neurocirujanos, cirujanos reconstructivos, anestesiólogos, auxiliares de sala, circulantes, enfermeras, instrumentistas, personal de aseo, entre otros.

El proceso

El 11 de diciembre de 2015 Samuel y Ezequiel nacieron unidos por su cabeza en el Hospital Calderón Guardia a las 9:58 de la mañana. Pesaron entre los dos 4.750 kilogramos.

Fueron varias semanas en el hospital, finalmente, llegaron a su nueva casa en Cartago.

Esta fue la primera vez que vimos a Samuel y Ezequiel, su familia se acostumbraba a una nueva rutina en la que también participaba José Francisco, el hermano mayor

Les colocaron unos dispositivos para separar la piel de la cabeza, vinieron muchísimos exámenes y los médicos elaboraron un plan para la separación.

Ese plan se puso en marcha este viernes a las 8:00 de la mañana y culminó la madrugada de este sábado.