Por Susana Peña Nassar |1 de noviembre de 2019, 13:28 PM

El Gobierno no tiene una estimación de cuántos deudores podrán optar por el plan de salvamento. 

Mientras los bancos analizan cómo lo van a implementar, los expertos coinciden en que la educación financiera es la única forma de “salvar” a quienes están ahogados en deudas. 

Parece ser una solución para todos aquellos que tienen graves problemas financieros. 

Pero los bancos ya lo advirtieron: el plan de salvamento no es para todos.
A pesar del anuncio y de las grandes expectativas que ha generado, no hay seguridad de que pueda tener un impacto masivo. 

Bancos como el Popular ya contaban con programas similares a los créditos de salvamento, pero analizan algunas modificaciones.

Son muchos los deudores que buscan asesoría para tratar de detener esa “bola de nieve” que les quita la paz.

Lo hacen por una sencilla razón: no saben cómo manejar sus finanzas. Por eso los expertos coinciden en que la única forma de salvarlos es por medio de la educación. 

El plan de salvamento establece como requisito obligatorio tres años de formación en la materia y el compromiso de no endeudarse más.

 Actualmente muchas casas comerciales y otros prestamistas privados no están regulados, es decir, no hay un reporte real de las deudas “informales” que adquiere una persona. 

Un proyecto de ley pretende incluirlas al centro de información crediticia, para que exista un perfil real de los deudores: así los bancos podrán tomar mejores decisiones a la hora de prestar dinero y evitarán que la bola de nieve siga aumentando su tamaño.