Por Christian Montero |17 de enero de 2019, 15:21 PM

La Policía de Control de drogas (PCD) puso fin al ilícito negocio que operaban ocho hombres en San Rafael de Quircot en Cartago.

Lo particular del caso es que los sujetos operaban la venta de drogas en las cercanías de una capilla de velación.

Cada uno de los sospechosos tiene un alias, por ejemplo, al líder lo conocen como “Tato” y según el Ministerio de Seguridad, tiene antecedentes por asalto y femicidio.

A su hombre de confianza le apodan “Chata” y quien era el principal vendedor de marihuana.

Alias “Cheo” de 46 años, es reconocido como uno los más importantes vendedores de cocaína del grupo, mientras que un sujeto apodado “Chacal” y de 19 años se encargaba de abastecer varios puntos de la zona de marihuana y cocaína.

Este caso fue denunciado a la policía antidrogas a mediados de junio del 2018 cuando las autoridades fueron alertadas de que dos hermanos de apellidos Jiménez Méndez realizaban dicha actividad ilegal.

Un hombre de apellidos Rojas Calderón era el proveedor de estupefacientes del grupo que, además de operar cerca de la capilla de velación, lo hacía en las inmediaciones de centros educativos y lugares de esparcimiento, como parques y canchas.

Los investigadores recibieron un total de nueve llamadas a línea confidencial 1176, en las que denunciaron a los integrantes del grupo desarticulado este jueves.

Gracias a esa información y al trabajo policial, la banda fue desmantelada por completo, a la vez que las autoridades decomisaron varias dosis de drogas y dinero en efectivo entre otras evidencias.