Por Juan Manuel Vargas |7 de noviembre de 2018, 9:11 AM

Padecer cáncer no debe ser sinónimo de inactividad para el paciente.

Especialistas instan a las personas con este mal asesorarse y practicar deporte ya que esto es beneficioso para el tratamiento.

Entre los beneficios de realizar actividad física en pacientes con cáncer están mejora la capacidad funcional, aeróbica, fuerza y flexibilidad, composición corporal, mejora la sensación de bienestar, disminuye o atenúa los efectos adversos del tratamiento.

El ejercicio es denominado por los expertos como una “polipíldora”, ya que genera efectos positivos tanto en la prevención como en el tratamiento de enfermedades.

Las personas que realizan actividad física disminuyen la mortalidad o el riesgo de cáncer de mama en un 50% y en el caso de cáncer de colon hasta en un 60%.

El sedentarismo causa el 9% de las muertes a nivel mundial y en muchos casos, es un factor que deriva a enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, males cardiovasculares y en algunas ocasiones hasta en cáncer.