Por Teletica.com Redacción |17 de octubre de 2018, 16:19 PM

Cartaginés venció a Herediano en la agonía y desató la locura en el Fello Meza, escenario de un partido con cierre de infarto.

A falta de cinco minutos para el pitazo final los florenses vencían 1-2 a los locales y sumaban un hombre más en la cancha luego de la expulsión de Jossimar Pemberton (85’).

Era el peor panorama para un conjunto blanquiazul que se jugaba esta noche muchísimo más que los tres puntos: en frente tenía a su rival más acérrimo, pero también era el regreso de Paulo César Wanchope a una casa de la que no se fue bien.

Eso y la posibilidad de estrellarse contra un Herediano alicaído era lo que menos se quería en la Vieja Metrópoli y la razón de ese renacer del orgullo brumoso.

Giovanni Clunie puso el empate al 88’, Marcel Hernández el júbilo al 90’.

Antes de esa locura Cartaginés había sido el primero en encaminarse hacia el objetivo. En solo ocho minutos William Quirós puso a gritar a la grada con un centro que se coló en la portería de Leonel Moreira, el mismo que 24 horas antes estaba en Estados Unidos observando desde el banquillo la caída de la Tricolor ante Colombia (3-1).

Sin embargo, la respuesta rojiamarilla no se hizo esperar. Junior Díaz, apoyado en un desvío y un copioso aguacero, fusiló a Darryl Parker desde fuera del área.

Ese balde de agua fría para los de casa se haría acompañar de otro más helada al 50’, cuando José Guillermo Ortiz convirtió en gol el penal que originó una mano del cubano Hernández en el área.

Eso y la roja de Pemberton parecían la estocada final para los brumosos y el final de una negativa racha para los florenses, que venían de sumar dos derrotas al hilo.

Pero faltaba la esperanza de Clunie y la locura de Hernández, el desenlace de un partido cargado de morbo, el júbilo de un equipo brumoso que amenaza con meterse en la lucha por la clasificación.