Por AFP Agencia |30 de septiembre de 2018, 8:33 AM

El español Alejandro Valverde se convirtió a los 38 años en nuevo campeón del mundo de ciclismo, este domingo sobre el exigente recorrido por la ciudad austríaca de Innsbruck, superando al escalador francés Romain Bardet, y convirtiéndose en uno de los corredores más longevos el ganar el oro mundial.

Valverde se mostró el más fuerte del cuarteto que afrontó el esprint final después de 258,5 kilómetros desde la salida y tras más de seis horas y media sobre el sillín. El canadiense Michael Woods fue tercero por delante del holandés Tom Dumoulin.

El corredor murciano, que fue segundo en... 2003, logró al fin uno de los pocos triunfos que le restaban en su carrera. En seis ocasiones había subido al podio del Mundial, y ahora podrá lucir el ansiado maillot arcoiris durante el próximo año.

Especialista de las clásicas por las Ardenas (5 veces ganador de la Flecha Valona, 4 veces de la Lieja-Bastoña-Lieja), Valverde ganó asimismo una vez la Vuelta a España, en 2009.

Su mejor victoria

"No me lo creo. Estoy sin palabras. Es la mejor victoria de mi carrera. Tantos años luchando, tantas medallas... y al final se ha conseguido", declaró el murciano con lágrimas asomando a los ojos.

"Gracias a la Federación Española de Ciclismo, todos han estado de 10. No podía fallarles", añadió el ganador de una Vuelta a España (2009), 5 veces ganador de la Flecha Valona, y 4 veces de la Lieja-Bastoña-Lieja, quien reconoció que llevaba "muchos años detrás de este título".

Valverde quiso dedicar su victoria a "toda la gente que (le) quiere y que siempre ha estado apoyando".

"Ha sido un sprint muy largo, en el que me han dejado toda la responsabilidad. He ido controlando la distancia hasta que a 350 metros de meta, he dicho: '¡Ahora! Arranco y no me espero a nadie', explicó Valverde.

Uno de los pocos lunares a su larga carrera fue ver su nombre salpicado en la operación Puerto contra el dopaje, lo que le costó una suspensión a comienzos de los años 2010.

Un recorrido que se cobró víctimas de peso

Por detrás de los cuatro primeros, el italiano Gianni Moscon acabó en quinto puesto, delante de un grupo en el que llegó el favorito Julian Alaphilippe (8º).

El corredor galo, llamado a ser el sucesor de Valverde en este tipo de etapas, no fue la única víctima prematura de las subidas por el Tirol austríaco.

El británico Simon Yates, reciente ganador de la Vuelta, cedió a 45 kilómetros de meta, el italiano Vincenzo Nibali, en la penúltima ascensión, de forma que el grupo quedó reducido antes de la subida al temible Höll, que fue coronado por los a la postre medallistas, seguidos muy de cerca por Tom Dumoulin.

Las selecciones de Italia y España fueron las más activas antes del último circuito (31 kilómetros).

Los últimos supervivientes de la escapada del día, que llegó a contar con 18 minutos de ventaja, el noruego Vegard Laengen y el danés Kasper Asgreen, fueron alcanzados antes de los últimos 20 kilómetros.

El vigente campeón del mundo eslovaco Peter Sagan quedó retrasado a 92 kilómetros de meta.

Ganador de las tres ediciones precedentes del Mundial, Sagan quedó rezagado en la primera dificultad montañosa del recorrido, mucho más selectivo que en los años precedentes. Durante la entrega de premios, Sagan acudió con espíritu deportivo a felicitar a su sucesor, diez años mayor que él.

Valverde firmó el primer oro mundial para España desde la victoria de Óscar Freire en 2004. Es uno de los campeones del mundo de más edad de la historia, por detrás del holandés Joop Zoetemelk (38 años también), quien ganó en 1985. Catorce años después de haber sido sexto en la victoria de Freire, el corredor del Movistar sumó su victoria 122ª, la más importante de su carrera.

Los colombianos, llamados a tener un papel importante en la carrera, no tuvieron un buen día pese a contar con un equipo muy potente y de buenos escaladores.

El mejor de ellos, Rigoberto Urán, entró en el puesto 33, a 2:57 de Valverde.