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4 preguntas para entender qué pasa en Irán, donde 6 días de protestas dejan al menos 22 muertos

Las protestas, descritas como las más grandes que ha visto el país desde las cuestionadas elecciones presidenciales de 2009, empezaron el pasado jueves.

Por BBC News Mundo |2 de enero de 2018, 10:38 AM
Una joven en medio del gas lacrimógeno
STR/AFP/Getty Images
Decenas de estudiantes han salido a protestar contra la situación económica en Irán.

Los muertos como resultado de las protestas antigubernamentales que sacuden a Irán desde hace seis días subieron a 22 este martes, luego de que otras nueve personas murieran durante la noche del lunes en enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad.

Las protestas empezaron el jueves en la ciudad de Mashhad, la segunda más grande del país, en medio del descontento por la caída en los estándares de vida y la situación económica en Irán, pero se han extendido a varias partes del país.

Según el corresponsal de la BBC para el Medio Oriente, Jeremy Bowen, se trata de la mayor demostración de disidencia de Irán desde las manifestaciones masivas que pedían reformas políticas en 2009.

Y aunque el presidente iraní, Hassan Rouhani, dijo que las protestas representaban "una oportunidad, no una amenaza", la Guardia Revolucionaria prometió responder con "puño de hierro" a los actos vandálicos por los que acusó a algunos manifestantes.

En BBC Mundo respondemos cuatro preguntas claves sobre la actual situación en Irán.

1. ¿Qué está pasando?

Las manifestaciones comenzaron el jueves en la ciudad de Mashhad, en el noreste del país, pero se han ido propagando hacia otras ciudades e incluyendo otros temas además del descontento por el alza de precios y la corrupción.

Manifestación
Reuters
En las calles de Teherán se registraron varias movilizaciones.

El sábado, una pequeña concentración celebrada en la capital, Teherán, creció hasta llegar a contar con varios miles de personas. En ella, los estudiantes se enfrentaron a la policía.

Y las protestas también se volvieron violentas en otras ciudades: seis personas murieron entre la noche del domingo y la madrugada del lunes en el pueblo de Tuiserkan, 300 kilómetros al suroeste de la capital, y las autoridades de Hamadán luego reportaron tres fallecidos más en otras localidades de la provincia.

Ese mismo día también se reportaron muertos en Izeh y Dorud, en la provincia de Lorestán.

Y el último brote de violencia se produjo en la región central de Isfahán, donde seis manifestantes murieron durante la noche del 1ro de enero en lo que fue descrito por las autoridades como un intento por hacerse con las armas de una estación de policía.

Un niño de once años, un hombre y un miembro de la Guardia Revolucionaria también murieron en enfrentamientos registrados entre la noche del lunes y la madrugada de este martes en otras partes del país.

Con esas muertes, el número de fallecidos en seis días de protestas ya suma al menos 22. Y las manifestaciones, que no se han limitado a los grandes centros urbanos, también se están volviendo más políticas.

Una manifestación
Reuters
Las autoridades han denunciado actos de vandalismo en medio de las protestas.

En lugares como Jorramabad, Zanjan y Ahvaz, por ejemplo, se han escuchado consignas a favor de la remoción e incluso de la muerte del Líder Supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei.

El general de brigada de la Guardia Revolucionaria Islámica Esmail Kowsari le dijo a la agencia de noticias iraní, ISNA: "Si la gente sale a las calles por los precios altos, no deberían haber gritado esos eslóganes ni haber quemado propiedad pública y automóviles".

El ministro del Interior de Irán, Abdolreza Rahmani-Fazli, le advirtió a la ciudadanía que a los manifestantes se les hará responsables por sus actos.

"Quienes dañen la propiedad pública, interrumpan el orden y violen la ley deben ser responsables de su comportamiento y pagar el precio", señaló el funcionario.

2. ¿Qué tiene que ver la política externa iraní?

El periodista del servicio persa de la BBC, Kasra Naji, indicó que un factor común en todos los lugares donde se han desarrollado manifestaciones es el clamor para que termine el gobierno clerical en Irán.

Estudiantes
EPA
Algunos estudiantes se enfrentaron a la policía.

También hay mucho inconformismo por las intervenciones de Irán en el extranjero.

En Mashhad, algunas personas gritaban: "No Gaza, no Líbano, mi vida por Irán", una referencia a lo que los manifestantes dicen ha sido el foco del gobierno en el extranjero y no en lo que debiera ser una prioridad: los asuntos internos.

Irán es una fuente de ayuda militar clave del presidente de Siria, Bashar al-Assad.

A Teherán se le ha acusado de proporcionarle armas a los rebeldes hutíes que luchan contra la coalición, liderada por Arabia Saudita, en Yemen. Sin embargo, el gobierno iraní lo ha negado.

También se le considera un aliado del movimiento libanés Hezbolá, que profesa la rama chiita del Islam.

3. ¿Cuál ha sido la reacción desde adentro de Irán y en el extranjero?

Las autoridades iraníes culpan de la inestabilidad a lo que denominan como antirrevolucionarios y agentes de las potencias extranjeras.

Y aunque el presidente Rouhani ha dicho que las protestas representan "una oportunidad, no una amenaza", también prometió medidas enérgicas en contra de los infractores de la ley.

Manifestantes progubernamentales
HAMED MALEKPOUR/AFP/Getty Images
El sábado se celebró una movilización multitudinaria a favor de las autoridades religiosas de Irán.

"Nuestra nación va a lidiar con esta minoría que canta consignas contra la ley y la voluntad del pueblo y que insulta la santidad y valores de la revolución", prometió el mandatario.

Y el sábado miles de manifestantes progubernamentales también participaron en movilizaciones para conmemorar el octavo aniversario de la supresión de las protestas de 2009.

Por su parte la influyente Guardia Revolucionaria prometió responder con "puño de hierro" si continúan las protestas.

Mientras que el líder supremo de la República Islámica, el ayatola Alí Jamenei, culpó abiertamente a "los enemigos de Irán" por los disturbios.

"En días recientes, los enemigos de Irán han empelado diferentes herramientas, incluido dinero, armas, política y servicios de inteligencia para crear problemas en la República Islámica", dijo Jamenei a través de su cuenta oficial en Twitter.

"El enemigo siempre está buscando una oportunidad y cualquier grieta para infiltrar y golpear a la nación iraní", continúa el mensaje.

"Tengo algo que decir sobre estos acontecimientos, y voy a hablarle a la querida gente cuando sea el momento apropiado" anunció también Jamenei.

Por su parte, Estados Unidos ha liderado el apoyo internacional a las protestas.

El presidente de ese país, Donald Trump, envió un mensaje a través de su cuenta de Twitter.

"Regímenes opresivos no pueden durar por siempre y llegará el día en que el pueblo iraní enfrentará una opción. El mundo está viendo".

La cancillería iraní calificó los comentarios del mandatario estadounidense y de otros funcionarios de ese país como "oportunistas y engañosos".

4. ¿Qué puede pasar?

El descontento en Irán es real, generalizado e incluso justificado: una investigación del servicio persa de la BBC encontró que, en promedio, los iraníes se han empobrecido un 15% en los últimos 10 años.

Las protestas, sin embargo, por lo general se han limitado a grupos relativamente pequeños de hombre jóvenes que demandan el fin del gobierno religioso.

Protestas en Irán
EPA
La mayoría de los manifestantes son hombres jóvenes.

"Se han extendido a pequeños pueblos de todo el país y pueden crecer en tamaño", destaca la periodista de la BBC Kasra Naji.

"Pero no hay un liderazgo evidente, pues las principales figuras de la oposición o bien han sido acalladas durante mucho tiempo, o están en el exilio", explica.

Algunos de los manifestantes han estado pidiendo el regreso de la monarquía, y el hijo del último sha, Reza Pahlavi, publicó un comunicado apoyando las protestas desde su exilio en Estados Unidos.

Pero, no hay nada que indique que Pahlavi sabe más de las protestas que el resto.

Y para el corresponsal de la BBC para Medio Oriente, Jeremy Bowen, no hay razones para creer que Irán está a las puertas de otra revolución.