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Tonya Harding, villana del patinaje que "encargó" que partieran una pierna a su rival Nancy Kerrigan

La figura de Harding es recordada en una película biográfica.

Por BBC News Mundo |7 de diciembre de 2017, 9:34 AM
Tonya Harding
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Tonya Harding es para muchos la mayor villana del deporte en Estados Unidos, pero otros consideran que ha sido una víctima.

Las imágenes de Nancy Kerrigan llorando en agonía, gritando "¿por qué?", una y otra vez, sacudieron al deporte estadounidense el 6 de enero de 1994.

La patinadora había sido atacada tras una rutina de entrenamiento y yacía en el suelo tocándose la rodilla ante el desconcierto de los médicos que la atendían.

En ese instante se temió por lo peor deportivamente hablando.

Tonya Harding y Nancy Kerrigan
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Harding y Kerrigan coincidieron en las sesiones de entrenamiento en los Juegos Olímpicos de Invierno de 1994.

Imposibilitada para participar en los campeonatos nacionales, se pensó que la agresión también la dejaría por fuera de los Juegos Olímpicos de Invierno de ese año en Lillehammer, Noruega, y podría poner fin a su exitosa carrera en el patinaje sobre hielo.

Para fortuna de Kerrigan las lesiones no fueron de gravedad, en contraste con la trama de conspiración, maltratos, envidia y venganza que fue revelando la investigación sobre el ataque.

Tonya Harding
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El caso sacudió el deporte estadounidense y tuvo repercusión mundial.

Una historia en la que surgió como figura principal Tonya Harding, compañera y rival de Kerrigan sobre el hielo.

Atención inusual

Es en Harding que se centra la película biográfica "Yo, Tonya", en la que se cuenta la vida de la que es considerada la mayor villana del deporte estadounidense.

La patinadora fue implicada en el ataque tras comprobarse que fueron su esposo, Jeff Gillooly, y su guardaespaldas, Shawn Eckhardt, los autores intelectuales del ataque perpetrado por Shane Stant con un bastón de metal.

Nancy Kerrigan
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Kerrigan logró la medalla de plata en Lillehammer.

Harding, la primera estadounidense en ejecutar un triple giro en el aire, no tuvo problemas en ganar el campeonato nacional y clasificar a los Juegos Olímpicos.

Desde el principio negó su participación en el ataque y pudo estar en Lillehammer, donde coincidió con Kerrigan, recuperada de los golpes que sufrió en su rodilla.

Al estar en el mismo equipo, las dos compartieron la misma sesión de entrenamiento en una escena que generó una expectativa inusual debido a los antecedentes del caso que estremeció a Estados Unidos y tuvo repercusión mundial.

Tonya Harding
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Harding no pudo contener el llanto tras su decepcionante actuación en Lillehammer.

En la competencia Harding no rindió como se esperaba, cohibida por la presión y problemas con los cordones de su zapatos, rompiendo en llanto tras la ejecución de su rutina.

Kerrigan, por su parte, obtuvo la medalla de plata.

Lo que nunca se sabrá

Tras su participación en las olimpiadas, Harding se declaró culpable de haber obstruido la investigación de la justicia, tras reconocer que se enteró de quién estaba detrás del ataque a Kerrigan después de que este ocurriera y no se lo comunicó a las autoridades.

La Asociación de Patinaje Estadounidense la despojó del título ganado en los Campeonatos Naciones de Detroit y la suspendió de por vida al considerar que sabía de la conspiración, algo que reconoció años después en su autobiografía.

Lo que nunca se ha podido esclarecer es hasta qué punto estuvo implicada en los planes de su esposo,

Harding y Kerrigan en un podio en 1991
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Harding (en el centro) y Kerrigan (a su izquierda) eran rivales, pero durante años también compartieron concentraciones en el equipo de Estados Unidos.

Declarada persona no grata, Harding se alejó de las pistas de patinaje sobre hielo, pero aprovechó su estatus como figura pública para participar en diferentes programas de televisión y forjar una fugaz carrera en el boxeo.

También tuvo problemas con la justicia por violencia doméstica en 2000 y su figura ha sido utilizada como inspiración para canciones y videos.

Pero no todos la juzgan por lo que le pasó a Kerrigan y la consideran como una víctima de los medios y la sociedad estadounidense.

Tonya Harding y Samantha Browning
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Harding tuvo una fugaz y poco exitosa carrera en el boxeo.

Quienes la defienden hablan de los abusos que sufrió de niña por parte de su madre y de los problemas que tuvo para poder llegar a competir, donde fue constantemente criticada por su manera de vestir.

El medio estadounidense Vulture le dedica un extenso artículo al culto que genera, haciendo referencia a museos y clubes de aficionados en su honor, posición que también publica el New York Post al hacer su crítica a la película que fue estrenada este mes.

Un filme que muestra la otra cara de la mujer que hace 23 años acaparó las miradas de millones de personas en el mundo.

Tonya
BBC
Margot Robbie interpreta a Harding en la gran pantalla en un filme que se estrena esta semana en EE.UU. (Foto: Neon)