Cartaginés aclara que nunca se informó sobre incumplimiento de iluminación del estadio Fello Meza
Según los brumosos los arreglos de iluminación se realizaron, pero nunca recibieron una notificación al respecto
El desorden en nuestro fútbol nacional continúa. Ahora es el Club Sport Cartaginés que salió a aclarar el tema de la iluminación de su estadio Fello Meza, luego de que este jueves la Unafut suspendiera el juego Carmelita – Grecia por falta de un aval y a solo horas de disputarse el encuentro.
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Según indicó el club brumoso, tras acatar una serie de parámetros que pidió el Reglamento de Licencias de Clubes y la Unafut, donde se invirtieron más de 3 millones de colones, se realizó una respectrevisión pasó por encima de lo requerido.
Sin embargo, Cartaginés nunca recibió una comunicación formal dando el aval respectivo, por lo que la decisión de suspender el juego fue tomada con sorpresa en las directivas blanquiazules.
“Para sorpresa, se nos informa anoche, de manera informal, que no aceptaban la certificación porque hay un procedimiento de medición que nadie tiene. Solicitamos a Licencias que por favor nos indicaran en qué consiste ese procedimiento. Unafut tampoco ha sido notificada ni lo tiene, así como tampoco nosotros.
“Queremos aclarar que el Club Sport Cartaginés ha cumplido con lo que manda el Reglamento de Licencias. Contamos con más de 500 luxes de potencia en este momento y no entendemos la razón por la que Licencias, de forma no oficial, ni siquiera nos ha notificado y proceden a decirle a Unafut que no programe el juego de Carmelita ante Grecia pactado para este jueves por la noche”, menciona el comunicado del equipo.
Desde hace más de una semana el partido entre verdolagas y griegos estaba programado a realizarse a las 8 p. m. en el estadio Fello Meza de Cartago, sede alterna de Carmelita. Dicha programación fue avalada por el Comité de Competición de la Unafut.
Sin embargo, este jueves en horas de la mañana la Unafut decidió suspender el encuentro por incumplimiento de las normas de iluminación que no le permiten al reducto cartaginés acoger un partido de Primera División.
La suspensión de dicho encuentro se dio a menos de 11 horas del cotejo, pese a que todo estaba listo para jugar, incluida la designación arbitral.