Por AFP Agencia |28 de febrero de 2017, 11:54 AM

Washington, Estados Unidos | Varios legisladores republicanos alertaron este martes que el plan del presidente Donald Trump de recortar en más de una tercera parte los fondos para el departamento de Estado, podría enfrentar fuerte oposición en el Congreso.

"Esto está muerto al llegar, no va a pasar", dijo el senador republicano de línea dura, Lindsey Graham, quien preside el subcomité de gastos en operaciones estatales y extranjeras del Senado.

Es imperativo que el uso del "poder suave" continúe siendo una prioridad de seguridad nacional, enfatizó, al señalar que si Trump presenta un plan para recortar drásticamente los fondos de asistencia extranjera "el Congreso lo rechazará".

El Wall Street Jornal y otros medios de Estados Unidos reportaron el martes que la administración de Trump está proponiendo recortar el presupuesto del departamento de Estado y de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) en un 37%, para compensar su propuesta de subir a 54.000 millones de dólares el gasto en defensa.

La mayoría de los recortes estarían dirigidos a programas de ayuda, dijo la administración.

"Así gastaremos menos fuera de las fronteras y gastaremos más de nuevo en casa", dijo el lunes Mick Mulvaney, el nuevo director de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca.

Pero el Congreso controla la cartera del gobierno federal, y Mitch McConnell, líder del partido Republicano en el Senado no parece receptivo.

¿Podía pasar el Senado un presupuesto que cortó esos elementos en un tercio? "Probablemente no", dijo el senador a reporteros. 

"La parte diplomática del presupuesto federal es muy importante" y a menudo cuesta mucho menos alcanzar el progreso de esa forma que por el lado de defensa, dijo McConnell, añadiendo que no está "a favor" de reducir el presupuesto para la diplomacia de Estado y de ayuda al extranjero.

En este año el presupuesto para el departamento de Estado y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional es de alrededor de 50.000 millones de dólares, una pequeña parte del monto total de presupuesto federal de más de tres billones de dólares.

El senador republicano Marco Rubio, quien ocupa un lugar en el Comité de Relaciones Exteriores, también expresó su oposición al recorte de fondos.

"Ayuda al extranjero no es caridad", retuiteó. "Él debe asegurarse de que está bien gastado, pero es menos del 1% del presupuesto y es crítico para nuestra seguridad nacional".