Por Luis Ortiz |21 de enero de 2017, 2:00 AM

El 2016 logró un récord que no debe enorgullecer a nadie, por el contrario, debe avergonzarnos.

Datos de la NASA demuestran que el año pasado fue el más caliente que la tierra haya registrado, rompiendo el récord del 2015 y del 2014.

Aunque el aumento respecto al 2015 fue de menos de 0.1 grados Celsius, el 2016 fue casi un grado Celsius más caliente que el promedio del siglo 20.

Lo más lamentable es que este es el tercer año consecutivo en que los humanos rompemos esta desagradable marca.